Europa está atravesando una ola de calor récord sin precedentes y tuvieron que tomar medidas extremas para evitar la descompensación de las personas, la propagación de incendios forestales y las muertes que ya superan el millar en plena temporada turística. Para los científicos, la multiplicación de estos fenómenos es consecuencia directa del cambio climático.
En el Reino Unido se vieron obligados a cerrar la pista de aterrizaje del aeropuerto Luton. Mientras que en Gales estallaron varios incendios y se cancelaron trenes y escuelas. En algunas instituciones educativas incluso llegaron a instalar piletas para que los niños puedan refrescarse.
En Francia alertan por un "apocalipsis" de altas temperaturas.
Los incendios forestales -promovidos por las alzas de temperaturas y las sequías- han hecho que los incendios forestales sean más difíciles de combatir en regiones como España, Portugal y Francia por lo que miles de personas fueron evacuadas. En España dos personas murieron en alcanzadas por las llamas y el primer ministro lamentó este hecho y expresó que "el cambio climático mata".
Además, en Francia alertan por un "apocalipsis" de altas temperaturas, fue el responsable del meteorólogo galo Météo-France quien definió este fenómeno de esa forma. Allí, cerca de 3.000 personas fueron evacuadas
Para evitar los golpes de calor, las autoridades piden que las personas solo salgan si es estrictamente necesario, hidratarse, evitar exponerse al sol y vigilar a las personas vulnerables.
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