Desde el viernes está disponible el formulario RASE para mantener los subsidios a la luz y el gas, que seguirán favoreciendo al 90% de los usuarios. A quienes cumplan con los requisitos de ingresos y bienes, sin embargo, se les quitará el aporte del Estado y tendrán alzas escalonadas hasta llegar a pagar la tarifa plena.
No podrán mantener el subsidio quienes por grupo familiar perciban ingresos de al menos 3,5 canastas básicas totales, que con el dato de mayo se trata de alrededor de unos $350.000, quienes tengan tres o más vehículos con una antigüedad menor a 5 años; tres o más inmuebles; poseen una embarcación, una aeronave de lujo o son titulares de activos societarios que demuestren capacidad económica plena.
Los aumentos para este sector se realizarán en tres tramos: los primeros se verán reflejados en las boletas que llegan a las casas en septiembre. Luego, volverán a subir en octubre y llegarán a la tarifa plena en diciembre.
Según confirmó el secretario de Energía, Darío Martínez, "el impacto en los usuarios del decil más alto va a ser en cada uno de los escalones de $1.200 o $1.300 adicionales”. Los aumentos dependerán del consumo de cada hogar, su ubicación geográfica y otras cuestiones que harán variar para arriba o para abajo esas cifras.
El impacto en los usuarios del decil más alto va a ser en cada uno de los escalones de $1.200 o $1.300 adicionales.
El subsidio que se aplica es distinto en cada caso y aparece en el detalle de las facturas. De ahí se podrá calcular el aumento de un aproximado de 200% hasta fin de año en el suministro de luz.
Por ejemplo, un usuario de Edenor que tuvo en junio una factura de $850 y un subsidio de $1800; al perder el aporte estatal pagaría una tarifa con más de 200% de aumento. En este caso, aumentaría $880 en cada aumento, para llegar a una tarifa plena de $2650.
En el caso del gas, Energía sostiene que la variable a tener en cuenta será el consumo, pero se estima una suba en promedio de $800.
Actualmente, el Estado subsidia más del 70% el costo de producción de la electricidad y el gas en todo el país y el monto cambia según la necesidad de distribución y transporte según la zona.
De acuerdo al decreto 332/22 la revisión de las condiciones para acceder o no a los subsidios de tarifas se revisará cada 180 días "tomando valores objetivos de ingreso, exteriorización patrimonial, consumos y cualquier otra información administrativa de la cual se infiera capacidad de pago".
