La línea 60 de colectivos, que recorre el Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA) y es una de las más importantes, se encuentra paralizada hoy en todos sus ramales por una medida de fuerza en contra de despidos.
El paro, que empezó a la medianoche y es por tiempo indeterminado, afecta el servicio que usan a diario miles de personas. El reclamo es por la reincorporación de empleados que fueron despedidos en los últimos meses, según dicen, de forma discriminatoria.
"Durante los últimos meses del corriente año el Grupo DOTA, que opera la línea 60, provocó numerosos despidos de carácter discriminatorio, entre ellos el de candidatos y delegados electos", denunció el cuerpo de delegados, la semana pasada, al anunciar la protesta que están llevando a cabo y podría incluir movilizaciones y cortes.
Paro de la línea 60 y reclamo de las empresas de transporte
Los representantes sindicales consideraron "este ataque de la patronal como parte del ajuste que intentan aplicar las grandes empresas a sus trabajadores, avanzando sobre sus derechos y condiciones de trabajo, buscando flexibilizar para mejorar sus ganancias, todo esto en el marco de la disputa por subsidios con el gobierno".
El reclamo de las empresas de transporte del interior es porque creen que existe una concentración desmedida de los subsidios para el AMBA, en relación del resto del país, por lo que pidieron $60 mil millones para las empresas de provincia, que hoy reciben $38 mil millones.
Según denunció la Federación Argentina de Transportadores por Automotor de Pasajeros (FATAP), en el AMBA se concentra entre el 75 y 85% de los subsidios, mientras que el porcentaje que queda, se reparte entre todo el resto del país.
Mientras tanto, en Diputados avanza el proyecto para aumentar los subsidios a estas empresas a $59.500 millones, una cifra cercana a la que reclaman.