El cantante de R&B, R. Kelly, fue sentenciado a 30 años de prisión por usar su fama para someter a jóvenes fanáticas a abusos sexuales sistemáticos.
Los fiscales le habían pedido al juez que sentenciara a Kelly, de 55 años, a más de 25 años tras las rejas, mientras que sus abogados defensores pidieron 10 o menos, diciendo que la solicitud de los fiscales era "equivalente a cadena perpetua".
El cantante, cuyo nombre completo es Robert Sylvester Kelly, ya había sido condenado el año pasado por nueve cargos, incluido un cargo de extorsión y ocho cargos de violaciones de la Ley Mann, una ley de tráfico sexual. Los fiscales del Distrito Este de Nueva York acusaron a Kelly de usar su condición de celebridad y una "red de personas a su disposición para atacar a niñas, niños y mujeres jóvenes para su propia gratificación sexual".
Kelly está recluido en un centro de detención federal en Brooklyn y, una vez sentenciado, se esperaba que lo trasladaran de regreso a Chicago, donde enfrentará otro juicio federal en agosto por cargos de obstrucción y pornografía infantil.
Las declaraciones de las víctimas de R. Kelly
El tribunal escuchó declaraciones de impacto de siete de las víctimas de Kelly, incluida Jane Doe 2, quien testificó en el juicio.
"Han pasado 23 años desde que nos conocimos, y has victimizado a muchas chicas desde entonces", dijo, dirigiéndose a Kelly. Más tarde agregó: "Ahora es tu turno de que te quiten la libertad".
Varias acusadoras testificaron que Kelly las sometió a caprichos perversos y sádicos cuando eran menores de edad. Alegaron que se les ordenó firmar documentos de confidencialidad y que recibían amenazas y castigos, como azotes violentos, si rompían lo que una de ellas llamó las “reglas de Rob”.
Algunas dijeron que creían que el cantante usaría en su contra cintas de video que grababa teniendo relaciones sexuales con ellas si exponían lo que estaba pasando.
Según las declaraciones, Kelly contagió de herpes a varias acusadoras sin revelarles que tenía una ETS, obligó a un adolescente a unirse a él para tener relaciones sexuales con una chica desnuda que emergió de debajo de un ring de boxeo en su garaje, y grabó un video vergonzoso que mostraba a una víctima con heces en el rostro como castigo por romper sus reglas.
"Nadie puede deshacer el daño que se les ha hecho a estas víctimas", dijo a los periodistas el miércoles fuera de la corte la abogada Gloria Allred, quien representó a tres víctimas que testificaron. "Pero al menos es hora de que el Sr. Kelly rinda cuentas".