El Tribunal Oral en lo Criminal y Correccional Nº 29 reanudó el proceso penal contra Cristian "Pity" Álvarez -que hoy cumple 50 años- y fijó como fecha de inicio del juicio para el 22 de febrero de 2023 en la causa que se le sigue por el homicidio a Cristian Maximiliano Díaz. Los jueces también hicieron lugar a lo solicitado por el fiscal Sandro Abraldes, y ordenaron el arresto domiciliario del ex cantante que deberá utilizar un dispositivo electrónico de monitoreo.
De acuerdo al pedido que hicieron desde el Ministerio Público Fiscal - y según lo indicado por los peritos médicos que intervinieron en la causa- durante una audiencia realizada a mediados de este mes, se dispuso que Pity Álvarez continúe con su tratamiento psicológico en un hospital de día.
La decisión del comienzo del debate fue con un fallo dividido por parte del tribunal. El juez Gustavo Goerner fijó las audiencias para los días 22 y 27 de febrero y el 1º, 6, 8 y 13 de marzo de 2023. La medida fue respaldada por el juez Hugo Navarro, mientras que el magistrado Juan María Ramos Padilla había considerado que el proceso debería realizarse “lo más pronto posible”.
En su resolución, el juez Goerner sostuvo que "el imputado se encuentra en condiciones de afrontar el proceso y, en consecuencia, corresponde reanudar el trámite de las presentes actuaciones", según publicó el sitio Fiscales.gob."En definitiva, puedo concluir que, a la fecha, las facultades mentales de Álvarez Congiu se encuentran estabilizadas, como también que entiende el alcance y consecuencias del proceso penal seguido en su contra", aseguró.
El imputado se encuentra en condiciones de afrontar el proceso y, en consecuencia, corresponde reanudar el trámite de las presentes actuaciones.
Juez Gustavo Goerner
En febrero de 2021, el debate había sido suspendido por los problemas de salud del exIntoxicados, luego de que su defensa solicitase una pericia por considerar que Pity no se encontraba en condiciones de afrontar el juicio. En esa oportunidad el tribunal se basó en un informe realizado por dos representantes del Cuerpo Médico Forense, que hicieron mención a un cuadro de “incapacidad sobreviviente” en alusión a la salud mental de Álvarez. El juicio debía empezar en octubre de 2019, cuando se cumplió un poco más de un año de su detención.
Actualmente, el artista no está detenido porque pasó 3 años con prisión preventiva, que es el máximo que puede estar una persona a la espera de su juicio. En abril de 2021, su abogado Javier Marino explicó que el juicio se encontraba suspendido por los problemas psiquiátricos de Álvarez y también reconoció que el artista estaba estresado y deprimido.
Debido al tiempo transcurrido y la depresión severa que diagnosticó el Cuerpo Médico Forense, el artista fue externado de PRISMA (programa psiquiátrico del penal de Ezeiza) e ingresó al circuito privado, con seguimiento del Juzgado Civil.