El presidente Alberto Fernández se reunió con el primer ministro británico Boris Johnson a quien le advirtió que no es posible un avance bilateral entre ambas naciones sin antes atender el reclamo argentino sobre la soberanía de las Islas Malvinas, pero no se logró avanzar en ese sentido.
La reunión entre ambos mandatarios tuvo lugar en el Tea Lounge del complejo Schloss Elmau en el marco del G7. Allí, Alberto Fernández planteó el reclamo por la paz, el fin del colonialismo y la vigencia del derecho internacional.
Johnson contestó que el tema se encuentra cerrado hace 40 años.
Según se informó oficialmente, también hablaron de la guerra en Ucrania y la importancia de fortalecer mecanismos globales para paliar los efectos de la guerra, pero el encuentro tan solo duro media hora porque hizo un fuerte reclamo por las Islas Malvinas, que Johnson rechazó.
Alberto Fernández señaló que el Comité de Descolonización de la ONU vota para que se abra una negociación todos los años y le pidió el restablecimiento de vuelos regulares entre las islas y el territorio continental argentino con la aerolínea de bandera.
Por su parte, Johnson contestó que el tema se encuentra cerrado hace 40 años y destacó la autodeterminación de ese pueblo. En tanto, el presidente argentino recordó que lo que ocurrió años atrás fue una guerra y llamó a reabrir las negociaciones: "Argentina está lista para retomar el diálogo".
Otro punto de desencuentro fue la forma de abordar el conflicto bélico en Ucrania mientras que Fernández apoya las negociaciones con Moscú, el primer ministro apoya militarmente a Ucrania.
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