Juan Manuel Castelli, subsecretario de Estrategias Sanitarias del Ministerio de Salud de la Nación, se refirió a cuál es la situación actual a partir de la confirmación de los dos primeros casos de infectados con el virus de la viruela del mono en Argentina, y aseguró que “están bien” y “evolucionando correctamente”.

Asimismo, el funcionario adelantó que el Gobierno está evaluando la posibilidad de acceder a las vacunas contra la enfermedad. “Estamos hablando con la Organización Panamericana de la Salud (OPS) para evaluar la disponibilidad y oportunidad de acceder a las vacunas, porque la disponibilidad es muy limitada ya que la producción también es muy escasa”, aseguró Castelli en diálogo con Gisela Busaniche, en Radio Con Vos.

En ese sentido, agregó que “lo primero en estos casos, es poder tener más evidencia sobre el impacto que tiene la vacuna”. “Hay una nueva vacuna de tercera generación, que fue licenciada hace unos 3 años en algunos países, que podría contribuir a disminuir el riesgo de presentar la enfermedad. Ahora, se está evaluando si tiene impacto para poder evitar un brote”, sumó.

Estamos hablando con la Organización Panamericana de la Salud (OPS) para evaluar la disponibilidad y oportunidad de acceder a las vacunas.

Consultado respecto a la mortalidad de la enfermedad, Castelli explicó que “los casos no han tenido gravedad ni un impacto de muertes”, aunque reconoció que “eventualmente, podrían evolucionar a formas graves”. “Los casos hoy están siendo de leves a moderados en líneas generales y lo que se está viendo es cuál es la circulación y hasta donde están llegando”.

Finalmente, el funcionario se refirió a la situación de los dos casos detectados recientemente en el país y aseguró: “Ambos casos están bien, están evolucionando correctamente y no tienen mayores dificultades al día de la fecha”.

Los casos hoy están siendo de leves a moderados en líneas generales

Asimismo, contó que “se está haciendo un seguimiento a los convivientes de estas personas porque, si bien que no hay riesgo de transmisión por vivir en el mismo sitio, se busca determinar si este virus tiene la misma capacidad que tenía el virus de la viruela, de transmitirse, por ejemplo, por contaminación de secreciones nasales”.

Para cerrar, Castelli intentó llevar tranquilidad a la población y reconoció que esta no es una enfermedad totalmente desconocida para los infectólogos puesto que ya estaba presente en algunas regiones de África. En esa línea, aseguró que “lo estamos siguiendo muy de cerca y estamos viendo que estos brotes que están sucediendo no tienen una expansión sustantiva en el número de casos con el correr de los días”.