Milan salió campeón de la Serie A, después de 11 años, y está recuperando el lugar que tuvo históricamente en el fútbol italiano. Después de esa gran alegría, Zlatan Ibrahimovic decidió operarse de su rodilla, después de muchos meses de dolor, padecimiento que lo llevaba a jugar muy poco tiempo por partido.
La intervención resultó exitosa, pero el sueco tendrá que estar marginado de las canchas entre siete y ocho meses. Sin embargo, el delantero, que cumple 41 años en octubre, tomó la decisión de seguir jugando.

Zlatan reveló todo lo que tuvo que atravesar en el último semestre. En una publicación en su Instagram, contó que durante los últimos seis meses jugó sin ligamento cruzado anterior en su rodilla izquierda, la cual estuvo hinchada todo este tiempo.
Y reconoció que solo pudo entrenar con el equipo diez veces en los últimos seis meses. Además, dijo que en este medio año le pusieron más de 20 inyecciones y vació su rodilla una vez por semana. “Casi no dormí durante seis meses debido al dolor. Nunca había sufrido tanto dentro y fuera de la cancha”, subrayó.
Y agregó que hizo de algo imposible, algo posible, porque en su mente solo tenía un objetivo, “convertir a mis compañeros y entrenador en campeones de Italia porque les hice una promesa”.
Ibrahimovic volvió al Milan gracias a Maradona. Es que, después de ver su documental, el goleador quería ir a jugar al Napoli para sacarlo campeón. Sin embargo, cuando estaba todo arreglado, se fue Ancelotti.
Es por eso que habló con Mino Raiola, su representante que falleció poco tiempo atrás, y le preguntó qué equipo necesitaba un cambio urgente. Su agente le contestó que el Rossoneri había perdido 5-0 en Bérgamo, por lo que tomó la decisión de volver a ese equipo. Y lo sacó campeón.