Luego del incidente vial que dejó dos muertos y diez heridos en la zona del Hipódromo de Palermo, Alejandro Bercovich contó que, "como muchas tragedias viales", fue protagonizado por un hombre manejando un BMW, un auto de alta gama.
Roberto Patricelli, el responsable de los muertos, venía a 150 kilómetros por hora y con exceso de alcoholemia. Según el conductor de Pasaron Cosas, el caso es muy similar al de Eugenio Beppo, el prensa de un Ministerio durante el gobierno de Mauricio Macri, que mató a un policía de tránsito y dejó a otro en una muy mala situación.
Los antecedentes de Patricelli me habilitan a hablar de una persona que nunca fue responsable al volante y creía que podía salir impune para siempre por la plata que tiene.
"Manejando -contó Bercovich- descubrí una dimensión de la ira, un estado de furia y enojo que tiene el que maneja que al que no maneja le es completamente ajeno". Esto llegó a su punto máximo con "los doble fileros", que creen que lo que ellos tienen para hacer "es más importante que lo de los otros". "Ese egoísmo lo tenemos todos los que manejamos, pero se expresa con más saña en las clases sociales privilegiadas, que siempre creen que lo que tienen para hacer es más importante que lo de los demás", afirmó.
"Los antecedentes de Patricelli me habilitan a hablar de una persona que nunca fue responsable al volante y creía que podía salir impune para siempre por la plata que tiene", planteó Bercovich. Subrayó que, en su experiencia, los conductores de los autos más caros suelen ser los más arriesgados e irrespetuosos. "Hay una sensación de impunidad que da el privilegio, que hace a mucha gente pensar que podés tomarte unas copas de vino y salir a manejar a toda velocidad", opinó.
"Me da la sensación que lo que mató al volante de ese BMW no fue el alcohol, sino la impunidad, la superioridad de clase que hace que, cuando el auto es importado y rutilante, siempre que tiene que pasar primero él", concluyó.