La semana pasada, el Banco Central volvió a subir la tasa de interés de 47% a 49%. Se trata del sexto aumento consecutivo que realiza el gobierno de Alberto Fernández en el marco del acuerdo con el FMI. El presidente y su ministro de Economía, Martín Guzmán, se comprometieron ante el organismo internacional a mantener las tasas reales positivas en moneda local.
El BCRA subió los tipos de interés para las Leliq (Letras de Liquidez) y los plazos fijos, lo que también obligó a mover la Tasa Nominal Anual (TNA) de las tarjetas de crédito. Como 49% es el máximo de TNA que pueden aplicar las entidades, queda en estas si aplican un interés menor a sus clientes.
Esta decisión impacta a los ahorristas en dos formas: en el rendimiento de los plazos fijos y en los costos del crédito. En el caso de los ahorristas en plazos fijos para personas humanas, el nuevo piso se fijó en 48% anual para las imposiciones a 30 días hasta $10 millones. Esto representa un rendimiento de 60,1% de tasa efectiva anual (TEA).
En el caso de las tarjetas de crédito, se paga el mínimo o no se paga el total de lo consumido en el mes subió a 53% nominal anual.
Cerca del 40% de los titulares de tarjetas de crédito usan, mes a mes, la posibilidad de pago conocida como revolving. Se trata de un tipo de tarjeta en la que todas las compras o disposiciones de efectivo que se realizan con ella, quedan aplazadas automáticamente. De este modo, el usuario puede realizar el pago en cómodos plazos.
El BCRA subió los tipos de interés para las Leliq (Letras de Liquidez) y los plazos fijos, lo que también obligó a mover la Tasa Nominal Anual (TNA) de las tarjetas de crédito.
La tasa que cobran los bancos por refinanciar saldos de hasta $ 200.000 tuvo un tope de 43% nominal anual desde inicios de 2021 hasta enero de este año. Ahí, el BCRA la elevó al 49% junto al primer ajuste de tasas y en marzo el costo quedó en 51%.
Luego de la medida anunciada el jueves pasado, ese costo sube dos puntos por encima de lo que era hasta ahora.
Actualización de los montos mínimos
AFIP actualizó los montos mínimos desde los cuales los bancos deben informar los movimientos tanto de las cuentas, como de las tarjetas de crédito. La última vez que se actualizó el monto fue a fines de enero, cuando pasó de $10.000 a $30.000.
Se elevó a $90.000 la cifra mínima para informar las acreditaciones, extracciones, saldos de las cuentas y los depósitos a plazo fijo.
A través de la resolución 5138/2022, publicada en el Boletín Oficial, donde se elevó de $30.000 a $90.000 la cifra mínima para informar las acreditaciones, extracciones, saldos de las cuentas y los depósitos a plazo fijo.
De este modo, los bancos podrán agilizar las operaciones y a su vez, recibirán información automática y permanente de las acreditaciones mensuales, extracciones, saldos de las cuentas, los depósitos a plazo y consumos con tarjetas.
