Asesinaron ayer a un fiscal paraguayo en una playa de Colombia. Marcelo Pecci, especializado en la lucha antidrogas, fue asesinado a tiros en una isla caribeña cerca de Cartagena y trascendieron algunas imágenes del posible autor del crimen.
Según informaron las fuerzas de seguridad colombianas, el funcionario fue baleado desde dos motos de agua cuando estaba en la playa de la península de Barú junto a su pareja, la periodista Claudia Aguilera, con quien pasaba su luna miel. Se estima que el asesinato fue realizado por sicarios.
Marcelo Pecci, de 45 años, participaba de la mayor investigación en la historia paraguaya sobre lavado de dinero proveniente del narcotráfico. Denominada "A ultranza Py", se realizaron 100 allanamientos en febrero, más de 40 detenciones y se incautaron bienes por unos 100 millones de dólares, producto del tráfico de cocaína a Europa.
El director de la Policía Nacional de Colombia, general Jorge Luis Vargas, ordenó que la escena del crimen fuera analizada de forma inmediata. Además, aseguró que llegará una “comisión de oficiales” paraguayos para la investigación y que esta tendrá el apoyado de autoridades de Estados Unidos.
“No teníamos conocimiento de que él estaba acá”, dijo Vargas. En este sentido, explicó por qué el fiscal no tenía custodia pese a que “era una de las personas más protegidas en Paraguay”, según la agencia de noticias ANSA.
En los videos, tomados por una de las personas que se encontraban en la playa, se puede ver a Aguilera arrodillada frente al cuerpo de Pecci. También, se observa a un hombre que parece custodiar la terrible escena. “Llegaron dos hombres en una lancha, se acercaron, le dispararon (...) y se fueron. Un guardia quiso acercarse, pero le dispararon también al guardia”, afirmó la viuda en diálogo con W Radio.
Las autoridades difundieron el retrato de uno de los presuntos autores del homicidio del fiscal paraguayo. A su vez, ofrecieron una recompensa de dos mil millones de pesos colombianos (cerca de 500 mil dólares) para quienes den información certera sobre el sospechoso.
