El humorista gráfico Ricardo Liniers Siri pasó por el stand de Radio Con Vos en la Feria del Libro para hablar "giladas random" sobre el humor, el fracaso y el desafío de ser creativo todos los días con el humor que lo caracteriza.
Frente a varios fanáticos que se acercaron a la radio para que el genio del humor gráfico firme sus ejemplares, Liniers contó sobre su vida en Norwich, estado de Vermont, Estados Unidos: "Mis amigos gringos me hablan del 8% de la inflación y yo les digo que eso es apropiación cultural", bromeó el creador de Macanudo en Pasaron Cosas.
Nos reímos porque tenemos consciencia que nos vamos a morir y es nuestra forma de resistirnos
El humorista contó que cuando comenzó con la tira no se sintió obligado a "escribir chistes todos los días" porque a quién escribe columnas no lo obligan a pensar un remate para todas: "A mi me dieron un espacio para decir algo, pero si se me ocurría una idea rara o interesante sin un buen chiste la dejaba y que la gente haga su laburo en su casa, quiero que el lector cierre las cosas".
En ese sentido, aseguró que con la tira diaria es necesario "amigarte con el fracaso" porque hay días buenos y otros no tanto y no se puede "tener el 100% de la efectividad". Por eso Liniers sostuvo que a veces del fracaso "salen cosas interesantes".
Cuando la vocación se vuelve trabajo es como rascarse porque cuando te pica es disfrutable, pero si seguís rascando en un momento empieza a doler.
"Cuando la vocación se vuelve trabajo es como rascarse porque cuando te pica es disfrutable, casi como cariño una caricia, pero si seguís rascando en un momento empieza a no ser tan lindo y a doler. Y si continuas hay sangre, carne, huesos. Al laburar de algo que te gusta, si la exigencia es muy grande, empieza a ser el rascarse de doler", confesó.
Pero rápidamente añadió que no va a quejarse porque "es una suerte increíble laburar de lo que te gusta" y que en este planeta "no es normal".
"El sentido del humor es un mecanismo de defensa. Siempre hubo un humor en los momentos más oscuros. Hubo chistes en el holocausto, incluso en un funeral aunque capaz no se lo contas a la viuda. Los seres humanos somos los únicos que sabemos que nos vamos a morir y los que hacemos chistes y arte. Nos reímos porque tenemos consciencia que nos vamos a morir y es nuestra forma de resistirnos a eso", subrayó.
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