La vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner es la protagonista de una nueva pulseada con la oposición a partir del conflicto entre dos poderes del Estado- el legislativo y el judicial- a partir de la intervención de la Corte Suprema en las designaciones del Consejo de la Magistratura.

En medio de este conflicto, Ernesto Tenembaum aseguró que desde la presidencia se decidió dar un paso atrás y no acompañar las posiciones del cristinismo, que habla de “golpe institucional”.

“Hay una visión que trasciende a la Casa Rosada: dejémosla hablando sola. Si Cristina habla que los presidentes no tienen poder, si Cristina habla del Consejo de la Magistratura, dejémosla hablando sola”, dijo.

Hay una visión que trasciende a la Casa Rosada: dejémosla hablando sola. Si Cristina habla que los presidentes no tienen poder, si Cristina habla del Consejo de la Magistratura, dejémosla hablando sola

En el análisis de Tenembaum, la aproximación de la vicepresidenta al Poder Judicial es “obsesiva” y es parte de uno de sus momentos “menos lúcidos”.

Por ello, el presidente Alberto Fernández no se ha expresado ni se expresará sobre el tema, lo que podría aumentar la tensión en la interna.

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“Cristina no es ninguna tonta, se va a dar cuenta. Porque es te llamo y no me atendés. Te digo de todo en público y no me respondés: qué soy yo, me dejás hablando sola. Eso tiene dos soluciones: o hablamos y lo resolvemos como personas normales o va a ir escalando hasta que la escuchen”, dijo.