Luego del incidente ocurrido en la noche del miércoles, Eduardo Salvio fue a declarar a la fiscalía encargada de su causa. Al jugador de Boca se lo acusa de lesiones leves cometidas en el contexto de violencia de género hacia Magali Aravena, su exesposa y madre de sus hijos.

Salvio se presentó en la fiscalía a las 18 y su declaración terminó poco antes de las 20. Tras escuchar su testimonio, la fiscalía decidió dejar al futbolista en libertad, pero le impuso una serie de medidas para garantizar que no se repita el incidente mientras dure la investigación.

El exjugador de la Selección Argentina estará impedido de acercarse a menos de 300 metros de Aravena. Además, no podrá contactarse con ella ni siquiera mediante llamadas, mensajes o redes sociales.

El exjugador de la Selección Argentina estará impedido de acercarse a menos de 300 metros de Aravena. Además, no podrá contactarse con ella ni siquiera mediante llamadas, mensajes o redes sociales. La única razón permitida para establecer contacto son los hijos que tienen en común. De todas formas, la fiscalía pidió que las partes elijan una persona para que oficie de intermediaria.

Otra de las restricciones aplicadas al futbolista es que no podrá manejar vehículos por los próximos 30 días y tendrá que pedir permiso en el juzgado N° 12 o en la misma fiscalía para salir del país. 

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En las próximas horas la causa quedará a cargo de la fiscalía penal y contravencional N° 10, especializada en violencia de género. Según anunciaron, ordenarán que Aravena se entreviste con el personal de la Oficina de Asistencia a Víctimas y Testigos, del Ministerio Público Fiscal.