El directorio del Banco Central (BCRA) subió ayer de 44,5% a 47% la tasa de interés nominal anual de las Letras de Liquidez (Leliq) a 28 días. Esta suba en 250 puntos básicos representa una Tasa Efectiva Anual (TEA) de 58,7% y funciona como referencia para el resto del sistema financiero.
Horas más tarde de que el INDEC confirmara que la inflación en marzo sufrió un aumento del 6,7%, la entidad publicó esta medida a través de un comunicado oficial. Además, decidió elevar los límites mínimos de las tasas de interés sobre los plazos fijos.
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Tras anticipar su reunión de directorio para este miércoles, el BCRA precisó las nuevas tasas de interés. En el caso de los depósitos de hasta 10 millones de pesos hechos por personas humanas, el nuevo piso será del 46% anual para las imposiciones a 30 días, lo que representa un rendimiento de 57,1% de TEA. Para el resto de los depósitos a plazo fijo del sector privado la tasa mínima garantizada será del 44%, con una Tasa Efectiva Anual de 54,1%.
“Las tasas de interés activas se mantienen en niveles compatibles con el impulso de la inversión y la producción, y el desarrollo del sector Mipyme", sostuvo el organismo conducido por Miguel Pesce. El BCRA señaló que seguirá regulando las condiciones de acceso al crédito para el consumo de las familias.
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Sobre la inflación de marzo, el Banco Central justificó que "es, en gran parte, fruto de un shock internacional que afectó especialmente a los precios de los alimentos y la energía, causado por la guerra en Ucrania". A esto, "se sumó la concentración de incrementos en precios de bienes y servicios regulados y aumentos estacionales". Sin embargo, desde la entidad esperan que la inflación comience a desacelerarse gradualmente a partir de abril y mayo.
Por otro lado, la entidad aseguró que “en coordinación con el Gobierno Nacional, utilizará todas sus herramientas para contribuir a morigerar los efectos de segunda vuelta sobre la inflación del shock de commodities”. En este sentido, señalaron que “la suba de tasas es condición necesaria pero, por sí sola, no suficiente para reducir la inflación”.
A su vez, detallaron que para lograr este objetivo es necesaria “la consolidación de la estabilidad cambiaria”, la “preservación del superávit de cuenta corriente del balance de pagos en los próximos años” y “la reducción del déficit fiscal”, entre otras medidas.
Por último, el Banco Central declaró que la suba de la tasa de interés “es consistente” con una evolución de los pasivos remunerados del BCRA que finalizarían en 2022 en niveles que, medidos en términos del PBI (Producto Bruto Interno), estarán por debajo de los del cierre de 2021.