Dirigentes sociales fueron detenidos por las protestas del 3 y 30 de marzo en Jujuy. Por este hecho, se les impuso una multa de un millón de pesos, hubo un allanamiento en sus domicilios y fueron detenidos.
Los dirigentes Sebastián Copello, del Polo Obrero y Juan Manuel Chorolque, del Movimiento Teresa Rodríguez (MTR), habían sido citados a una audiencia el viernes pero no se presentaron y fueron detenidos en sus casas. Durante cuatro horas permanecieron desaparecidos y sus abogados defensores no pudieron contactarlos.
Luego de ser trasladados a la unidad penitenciaria del barrio Alto Comedero, se les impuso una multa de un millón de pesos. También existe una orden de detención contra Verónica Urzagasti, dirigente del Movimiento Argentina Rebelde (MAR) que aún no fue efectivizada.
También existe una orden de detención contra Verónica Urzagasti, dirigente del Movimiento Argentina Rebelde (MAR) que aún no fue efectivizada.
En las protesta del 3 de marzo se pidió por mejores salarios, partidas para comedores y merenderos y otras reivindicaciones, pero fueron reprimidos por miembros de la Policía provincial y Gendarmería Nacional. En ese contexto, quince personas fueron demoradas y hubo siete detenidos. Por esto, el 30 de marzo se pidió su liberación con otra movilización y fueron multados por contravenciones.
Esos días hubo también movilización en favor del gobierno de Gerardo Morales organizada por militantes de la UCR, pero en ese caso no hubo consecuencias.
El fiscal Diego Funes imputó a los detenidos por los delitos de “entorpecimiento de transportes y servicios” y “desobediencia a la autoridad“. El caso se encuentra en el Juzgado especializado de control en lo penal económico y delitos contra la administración pública, a cargo del juez Rodolfo Fernández.