Según la compañía nuclear ucraniana Energoatom, muchas de las tropas rusas que ocupaban la antigua planta de energía nuclear en Chernobyl desde el comienzo de la invasión, comenzaron a retirarse. La empresa informó que dos columnas de las fuerzas rusas partieron hacia la frontera con Bielorrusia, dejando solo unas pocas en el lugar.
La compañía aseguró que las tropas rusas habían cavado trincheras en la parte más contaminada de la zona sin saberlo, recibiendo "dosis significativas" de radiación. Algunos soldados estarían siendo tratados en Bielorrusia por este tema. Sin embargo, el ejército ruso dijo que después de capturar la planta los niveles de radiación se habían mantenido dentro de un rango normal.
Las tropas rusas abandonan Chernobyl para enfocarse en la región oriental de Donbass.
La retirada tiene sentido en relación a lo anunciado en los últimos días por Rusia, que dijo que reducirá sus operaciones en el norte de Ucrania alrededor de Kiev, y centrará sus fuerzas en la región oriental de Donbass. En esta línea, el secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg, había dicho lo mismo: que se retiraban para reagruparse, reabastecerse y reforzar su ofensiva en Donbass.
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La ocupación rusa en Chernobyl desde el 24 de febrero estuvo plagada de preocupaciones sobre cortes de energía y problemas para el personal, muchos de los cuales quedaron atrapados allí durante semanas y no pudieron regresar a casa. Aunque ya no es una central eléctrica en funcionamiento, nunca se abandonó por completo y aún requiere una gestión constante.