El millonario ruso dueño de Supermercados DIA se quejó de las sanciones que la Unión Europea realizó en el marco del rechazo a la invasión de Rusia a Ucrania.

En una entrevista, Mikhail Fridman afirmó que no sabía “cómo vivir" por las sanciones, a las que calificó de "infundadas e injustas". El magnate tiene un patrimonio neto de USD 10.100 millones y fue sancionado por la Unión Europea el 28 de febrero y por el Reino Unido el 15 de marzo.

Cómo lo afectaron las medidas

Fridman tiene una asignación de 2.500 libras (unos USD 3.300) al mes y debe solicitar una licencia al gobierno británico -dado que vive en el Reino Unido- para gastar dinero.

“Creíamos sinceramente que somos tan buenos amigos del mundo occidental que no podíamos ser castigados”, reconoció a Bloomberg.

Desde que comenzó la invasión de Ucrania, la riqueza del empresario se redujo en USD 4.000 millones, según Bloomberg. Además, el cofundador de la firma de inversión londinense LetterOne y ex miembro de la junta directiva de la compañía bancaria rusa Alfa-Bank afirmó que le congelaron su última tarjeta bancaria en funcionamiento en el Reino Unido.

Creíamos sinceramente que somos tan buenos amigos del mundo occidental que no podíamos ser castigados.

Fridman renunció al directorio de Alfa-Bank un día después de que la UE lo sancionara. También renunció a la junta directiva de LetterOne, la firma de inversión que cofundó.

Sobre la invasión a Ucrania

Pese a su molestia con las medidas, el magnate reconoció: “Mis problemas no son nada en comparación con los problemas de ellos”, dijo a Bloomberg, en referencia a los ucranianos atrapados en el conflicto.

Estoy convencido de que la guerra nunca puede ser la respuesta. Esta crisis costará vidas y dañará a dos naciones que han sido hermanos durante cientos de años.

“No hago declaraciones políticas, soy un hombre de negocios con responsabilidades para con mis muchos miles de empleados en Rusia y Ucrania. Sin embargo, estoy convencido de que la guerra nunca puede ser la respuesta. Esta crisis costará vidas y dañará a dos naciones que han sido hermanos durante cientos de años. Si bien una solución parece terriblemente lejana, solo puedo unirme a aquellos cuyo ferviente deseo es que el derramamiento de sangre termine. Estoy seguro de que mis socios comparten mi punto de vista”, aseguró Fridman en una carta que publicó en febrero.

Fridman explicó en su carta que nació en el oeste de Ucrania, donde vivió hasta los 17 años, y que sus padres siguen viviendo en Lviv, su ciudad “favorita”. Ucraniano de nacimiento, Fridman también señaló que pasó “gran parte” de su vida como ciudadano ruso, “construyendo y haciendo crecer negocios”.

“Estoy profundamente apegado a los pueblos ucraniano y ruso y veo el conflicto actual como una tragedia para ambos”, lamentó el magnate en su carta.