El cuerpo de un bebé que nació sin vida en un hospital de Concordia, Entre Ríos, fue incinerado antes de poder ser entregado a sus padres al ser colocado "por error" en una bolsa para residuos patogénicos destinados a la quema, informaron hoy fuentes judiciales.
El hecho ocurrió entre el lunes y martes pasado en el hospital "Delicia Concepción Masvernat", y la dirección del centro asistencial inició un sumario para determinar si se trató de "omisión, malicia o carencia de profesionalismo". En tanto, la Justicia provincial también inició una investigación que quedó a cargo del fiscal Martín Nuñez quien analiza los videos de cámaras de seguridad para determinar los responsables.
El cuerpo fue colocado en una bolsa roja que se utiliza para residuos patológicos que luego fue incinerada en un horno pirolítico.
Según la investigación, una joven oriunda de la localidad de El Salvador, a unos 60 kilómetros del hospital, llegó con un turno para una cesárea para extraer el cuerpo del nonato. A las 17.50 concluyó la intervención y los padres decidieron conocerlo y vestirlo para trasladarlo al próximo día a su localidad y realizar su sepelio. Cincuenta minutos después, el cuerpo ingresó a la morgue donde iba a permanecer hasta el martes, cuando el servicio de sepelio lo trasladaría a su ciudad.
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Sin embargo, al llegar los empleados de la casa de sepelios se constató que el cuerpo había desaparecido, sin horario de salida de la morgue. Fue entonces cuando se descubrió que había sido colocado "por error" en una bolsa roja, que se utiliza para residuos patológicos y que luego fue incinerada en un horno pirolítico. "Para esta Dirección es prioritario que esté hecho se esclarezca para poder determinar las medidas pertinentes", indicó el hospital.
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