En las últimas horas, desde la justicia investigaron a un ídolo de Boca por "irregularidades en la venta de departamentos y cocheras" que no fueron entregados, a pesar de haber sido abonados en dólares. Es por eso que lo embargaron por 1.8 millones de dólares y 2 millones de pesos.

Se trata del Beto Márcico, campeón con el Xeneize en 1992, luego de una sequía de 11 años. El ex futbolista está acusado de presunta "defraudación por desbaratamiento de derechos acordados cometida en forma reiterada, en un total de 22 ocasiones", según sostiene el fallo. Martín Herrera, ex compañero del enganche, compró una de esas propiedades y lo denunció por estafa.

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Además, se precisa que en la mayoría de estos casos habría cometido estelionato. Es decir, vender un bien ajeno como propio. No solo eso, sino que su hijo Lucas también fue procesado con la misma carátula. Sin embargo, ninguno de los dos recibió prisión preventiva.

“No caben dudas, al menos en esta instancia sumarial preparatoria, de que padre e hijo participaron activamente en la ejecución de los hechos con distribución de roles que abarcaron la totalidad de las maniobras investigadas, en un mismo nivel de responsabilidad y en términos de coautoría”, afirma el fallo.

El ex futbolista está acusado de presunta "defraudación por desbaratamiento de derechos acordados cometida en forma reiterada, en un total de 22 ocasiones".

Márcico se defendió y dijo que “no se les vendió ninguna propiedad", sino que prestaron dinero y les retornaron intereses. "Aún no se les devolvió el capital aportado y ello motivó el reclamo formulado”, concluyó el ex jugador de Boca.