Un joven alemán de 18 años disparó hoy durante un curso en un anfiteatro de la más antigua universidad alemana de Heildelberg, mató a una mujer e hirió a otras tres personas antes de suicidarse.

La Policía local informó que el atacante había enviado un mensaje de WhatsApp antes de ingresar al campus de la universidad en el que decía que "la gente tiene que ser castigada ahora" y anunciaba su deseo de ser sepultado en el mar.

Hasta el momento la investigación indica que el atacante no tuvo motivaciones políticas ni religiosas ya que no existió "ninguna carta de reivindicación".

El canciller alemán Olaf Scholz expresó su consternación por el episodio durante una rueda de prensa en Berlín, donde señaló que la noticia del ataque le "rompió el corazón" y transmitió sus condolencias a las familias de la mujer fallecida y de los tres heridos. "Mis pensamientos están con las víctimas, sus familiares y, por supuesto, los estudiantes de la Universidad de Heidelberg".