La popular influencer Dani La Chepi decidió sincerarse sobre su salud para advertir a sus seguidores que atrás de la delgadez no siempre se encuentran cuerpos saludables.
“Yo tengo mucho público adolescente, y la verdad es que uno muestra todo lo lindo en las redes sociales. Yo no estoy flaca porque me cuido o soy saludable o entreno, estoy flaca porque tengo anorexia nerviosa y eso no está bueno”, explicó en declaraciones a la Once Diez/Radio de la Ciudad.
La conductora de "El juego de la Oca" contó que tiene muchos seguidores adolescentes y que por eso decidió hablar al respecto: "Me dicen: ‘Ay qué hermosa que sos, ojalá tuviera tu cuerpo’, y la verdad es que no es un cuerpo saludable. La anorexia nerviosa es algo con lo que yo convivo".
Además destacó que muchos la felicitaban por entrar en las cazas de su hija, pero La Chepy respondió "¿Qué es lo bueno de eso? ¿No tener fuerzas para levantar a tu hija? No hay nada de bueno en eso”.
“De a poco trato de tomarme las cosas de otra manera, intento hacer cosas para sentirme mejor y combatir lo que tengo, la anorexia es algo serio. Yo voy al médico, me cuido, preveo mis problemas en los intestinos, que son graves. Hago terapia, trato de calmarme, de estar más tranquila. Hablando con mi psicólogo descubrí que lo primero que me pasa es que proyecto el fracaso de cualquier cosa que emprendo, intento cambiar de actitud de a poco”, concluyó.
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Qué es la anorexia nerviosa
Se trata de un trastorno alimenticio que causa que las personas pierdan más peso de lo que se considera saludable para su edad y estatura. Se caracteriza por la presencia de restricción alimentaria (dieta) intensa, motivada por la insatisfacción con el propio cuerpo y un miedo punzante a engordar.
Algunas de las señales de alerta son el miedo intenso a ganar peso, la distorsión de la imagen corporal (las personas se ven gordas a pesar de estar extremadamente flacas), el hablar todo el tiempo de comida y cuerpos, la pérdida significativa del peso, pueden aparecer signos físicos como caída del cabello, pérdida de la menstruación, aparición de lanugo (pelitos finos que crecen en zonas como la espalda y que son un intento del cuerpo para preservar el calor), la tristeza, angustia e irritabilidad y el aislamiento social. Es importante consultar con un médico y especialista de salud mental para un diagnostico y tratamiento.