El gobierno de Canadá anunció un acuerdo por 31.500 millones de dólares para reformar su sistema de bienestar infantil "discriminatorio" y compensar a los más de 150.000 niños indígenas separados de sus familias y puestos bajo cuidado estatal en las últimas tres décadas, informaron fuentes oficiales.
El acuerdo incluye en primer lugar 20.000 millones de dólares canadienses (15.700 millones de dólares) para los niños indígenas separados de sus familias y cuidadores, puestos bajo cuidado estatal generalmente en escuelas que los integraban forzosamente, según informó la agencia de noticias AFP. Esas instituciones se conocieron como "escuelas residenciales".
Por otro lado, se destinarán 20.000 millones de dólares canadienses para reformar los servicios para la niñez y la familia en los próximos cinco años.
En julio pasado, al menos 10 iglesias canadienses fueron quemadas luego de que se hallaran más de 1.200 cadáveres de niños indígenas, enterrados sin nombre, en las instituciones en las cuales eran sometidos a un proceso de “asimilación”.
En las últimas tres décadas, al menos 150.000 niños indígenas fueron separados de sus hogares y llevados a una de las 139 escuelas residenciales.
"Ningún dinero podrá compensar el trauma que sufrió la gente –afirmó Patty Hajdu, ministra de Servicios Indígenas–. Pero estos acuerdos reconocen ante los sobrevivientes y sus familias el daño y el dolor causados por la discriminación en el financiamiento y los servicios".
En tanto, el ministro a cargo de las relaciones con los indígenas, Marc Miller, calificó al acuerdo celebrado ayer como "el mayor arreglo en la historia de Canadá".
La indemnización surgió tras las demandas planteadas por familias indígenas contra el gobierno canadiense, y reconoce que el "financiamiento discriminatorio" de los servicios de niñez y familia en las comunidades indígenas causó sufrimiento a los involucrados.
El ministro a cargo de las relaciones con los indígenas, Marc Miller, calificó al acuerdo celebrado ayer como "el mayor arreglo en la historia de Canadá".
Los niños indígenas son más de la mitad de los menores en cuidado temporal de Canadá, pese a ser menos del 8% en el total de menores de 14 años, según el censo de 2016.
En las últimas tres décadas, al menos 150.000 niños indígenas fueron separados de sus hogares y llevados a una de las 139 escuelas residenciales, destacó la agencia de noticias AFP.
Miles murieron, en su mayoría de desnutrición, enfermedades o negligencia, en lo que un comité de verdad y reconciliación llamó "genocidio cultural", en un informe de 2015.
Otros fueron abusados física o sexualmente y tras el descubrimiento de más de 1.200 tumbas sin marca en estas escuelas, Canadá comenzó a asimilar el trauma nacional.