José Carlos Olaya González, el conductor del auto que atropelló a cinco ciclistas y mató a Marcela Bimonte este domingo, es el hijo de José Olaya Villajuán -El Cholo-, histórico productor de Gilda que murió en junio del año pasado.
El productor falleció a los 69 años luego de atravesar un cuadro de coronavirus que se complicó. Anteriormente había estado detenido por el asesinato de Carlos Chávez Navarrete, el cantante del grupo Karicia. La acusación fue por obrar con la premeditación de dos o más personas y por haber cometido el homicidio por promesa remunerativa.
El productor fue condenado por encubrimiento, pero finalmente absuelto seis meses después de su detención por la Sala III de la Cámara Penal de La Plata al considerar que no había pruebas para condenarlo. Fue detenido en enero de 2014 después de estar 10 años prófugo cuando estaba por huir a Montevideo con la idea de finalmente refugiarse en Lima, Perú.
Los antecedentes de José Carlos Olaya González
Por su parte, el conductor de 32 años fue imputado hoy por homicidio simple con dolo eventual, tal como pidió la Agencia Nacional de Seguridad Vial (ANSV) y podría enfrentar de 8 a 25 años de cárcel. Esta pena aplica a aquellos conductores que aún advirtiendo que podían provocar la muerte siguieron con su conducción sin hacer nada para evitar ese desenlace.
Olaya González dio positivo por consumo de estupefacientes, además de haberse fugado del lugar del hecho y violar la velocidad permitida en la zona que son 30 kilómetros por hora.
Durante la indagatoria de esta mañana, el acusado se negó a declarar- La fiscalía a cargo de Natalia Pla solicitará mañana su prisión preventiva. Mientras que la familia considera que el peligro de fuga es enorme. El acusado tiene antecedentes penales por robo agravado, encubrimiento y portación de arma de guerra.
El padre de José Carlos Olaya González y productor había estado detenido por el asesinato de Carlos Chávez Navarrete, el cantante del grupo Karicia.
En agosto de 2010 fue condenado a 6 años y 9 meses de prisión por Robo portando un arma de fuego no declarada. Además, fue imputado en febrero de 2017 por Encubrimiento agravado por Ánimo de Lucro.
En el auto con el que atropelló a los ciclistas había latas de cerveza, bebidas energizantes y una botella vacía de champagne. El test de drogas dio positivo por haber consumido marihuana, aunque se descartó que estuviese alcoholizado cuando manejaba el Ford Focus con el que mató a Marcela Bimonte.
