Ocurrió en la reserva de Punta Tombo, uno de los grandes atractivos naturales chubutenses. Este lunes, los guardafaunas de la zona descubrieron una enorme matanza de cientos de pingüinos, un desastre ambiental, en principio, irreparable.

Desde el Ministerio de Turismo del gobierno de Mariano Arcioni denunciaron que el triste hecho fue responsabilidad del dueño de un campo de la zona. Aparentemente, este hombre construyó un sendero sin recibir autorización de las autoridades correspondientes. Lo realizó con "una maquinaria de alto porte", según le explicó la fiscal del caso, Florencia Gómez, a Infobae. La construcción "enterró a todos los nidos de pichones de pingüinos" en su camino.

La construcción "enterró a todos los nidos de pichones de pingüinos" en su camino". 

Este hecho se combinó con otro, de características y consecuencias similares. Al mismo tiempo que se construía el camino en cuestión, se electrificó el cercado, lo que generó la muerte por electrocución de decenas de pingüinos. Una de las hipótesis que se manejan en la fiscalía a cargo del caso plantea que el responsable de este trágico crimen buscaba unir su propiedad con la costa de forma ilegal. 

Ahora, se enviará a la zona una comisión de investigación conformada por agentes de la policía y personal de investigaciones para allanar, este martes, el predio. También participarán del operativo guardafaunas, biólogos, miembros del Conicet y funcionarios del Ministerio de Turismo de Chubut. En principio, el sospechoso será acusado por violar la Ley de Maltrato Animal. A medida que avance la investigación, de acuerdo a los hechos que se descubran, la fiscal Gómez evaluará si le imputan otro delito.