La ficción "El juego del calamar" ingresó ilegalmente en Corea del Norte, a través de pendrives. El distribuidor de las copias será ejecutado en un pelotón de fusilamiento. A su vez, uno de los estudiantes que vio la serie recibió una condena a cadena perpetua.
Una fuente policial de Corea del Norte aseguro que “todo esto comenzó la semana pasada cuando un estudiante de secundaria compró en secreto una unidad flash USB que contenía la ficción de Corea del Sur El juego del calamar y lo vio con uno de sus mejores amigos en clase”.
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Luego de que las autoridades sorprendieran a estudiantes de secundaria viendo el programa, a seis de ellos los sentenciaron a cinco años de trabajos forzados. Incluso, maestros y trabajadores de la escuela fueron despedidos y enfrentan el destierro con tareas en minas de carbón de por vida, citó la agencia Radio Free Asia (RFA).
En diciembre de 2020, Corea del Norte aprobó la “Ley de Eliminación del pensamiento y la cultura reaccionarias”. La norma prohíbe la entrada y difusión de material cultural como películas, obras de teatro, música y libros que vengan de otras zonas geográficas.
El régimen de Kim Jong-un criticó El juego del calamar: “Es lo que pasa en la triste realidad de una sociedad surcoreana bestial”. En este sentido, la agencia RFA sugirió que puede haber “vientos sangrientos en la investigación y en el castigo”, ya que las autoridades buscan saber quiénes más intervinieron en la distribución.
