Este fin de semana largo, Santa Fe sufrió un ataque de palometas. La gente, que fue a pasar el día en las playas, tuvieron que enfrentarse a una actividad peligrosa, al punto que dejaron 30 heridos, entre ellos, una joven de 13 años que perdió un dedo.

Sergio Berardi, representante de la Seccional Santa Fe del Sindicato Único de Guardavidas, expresó por qué se dio este fenómeno: “El hábitat natural de la palometa es la laguna, y la falta de caudal y la alteración por las altas temperaturas hace que el cardumen se vuelque a la costa. Por eso, se dan casos tan seguidos”.

Pedimos al municipio reforzar con más duchas para dar una alternativa a los bañistas, y pedimos a la gente que use esos medios", dijo Berardi.

Además, explicó: “La mordedura no tiene la misma incidencia en menores que en personas adultas”, y confirmó que hay 30 heridos en la Costanera y que “hubo una menor a la que le amputó un dedo del pie”. La niña fue atendida en el Hospital de Niños Doctor Orlando Alassia.

Berardi advirtió que "esta temporada contará con la presencia de palometas", y recordó que "la playa no está habilitada como balneario, sí como solárium". “Pedimos al municipio reforzar con más duchas para dar una alternativa a los bañistas, y pedimos a la gente que use esos medios”, manifestó el guardavidas.