La muerte de Alicia Sánchez, joven de 25 años que el domingo a las 4 de la mañana cayó desde el décimo piso por el hueco de un ascensor en Pinamar, tuvo un importante avance en las últimas horas.

La víctima tuvo varias lesiones tras la caída hasta que su cuerpo quedó en el techo del ascensor. De acuerdo a la autopsia, lo más grave pasó cuando alguien llamó al elevador ya que provocó que su cuerpo fuera arrastrado por el mismo, y le generó muchas lesiones.

Juan Pablo Calderón, fiscal a cargo de este caso, imputó por la muerte de la mujer al técnico del ascensor y al encargado del edificio ubicado en Constitución.

Los peritos confirmaron que no había fracturas en el cráneo, pero fue víctima de múltiples traumatismos en el abdomen y el tórax que desencadenaron en un shock hipovolémico y finalmente tuvo un paro cardíaco.

Se le harán tres pericias a la mujer: mecánica que analizará el funcionamiento del ascensor, desde el mantenimiento del mismo hasta las revisiones técnicas y toda la relacionado con la normativa; una pericia accidentológica que determinará la caída y la muerte; una pericia médica y estudios complementarios para buscar la presencia de sustancias en el cuerpo y las heridas pre y postmortem.

Juan Pablo Calderón, fiscal a cargo de este caso, imputó por la muerte de la mujer al técnico del ascensor y al encargado del edificio en Pinamar ubicado en Constitución, entre Simbad y Del Libertador, donde la víctima estaba participando de una reunión familiar.