El Juego del Calamar es una nueva serie de Netflix que salió hace un tiempo en Asia y hace unos días se lanzó en todo el mundo. En poco tiempo, la ficción realizada en Corea del Sur se convirtió en la más vista en Argentina.

Sung Ki-hoon vive con su madre anciana y tiene muchas deudas debido a que se dedica a apostar. El hombre necesita dinero para poder pagarle a sus prestamistas ya que si no lo consigue, tiene que pagarles con sus órganos. Desesperadamente, el hombre decide entrar en un juego misterioso en el que el ganador recibiría una gran compensación económica.

“Quería contar una historia que fuera una alegoría o una fábula sobre la sociedad capitalista moderna, algo que mostrara una competencia extrema, como la competencia de la vida", explicó el director.

Junto a él hay otros personajes que necesitan el dinero. Jo Sang-woo es un joven que se graduó de una de las universidades más prestigiosas de Corea pero, además de tener deudas millonarias, es perseguido por la policía por cometer fraude. Por otro lado se encuentran Kang Sae-byeok, una refugiada proveniente de Corea del Norte que necesita el dinero para salvar a su familia y Abdul Ali, un inmigrante indocumentado de Pakistán que quiere mantener a su familia en el país.

A pesar de que algunos programas de gran calibre están escritos y dirigidos por un grupo de productores, en El Juego del Calamar toda la responsabilidad la tiene Hwang Dong-hyuk, un famoso cineasta de Corea que hace más de una década que comenzó a pensar en la historia aunque al principio quería que fuera una película.

“Quería contar una historia que fuera una alegoría o una fábula sobre la sociedad capitalista moderna, algo que mostrara una competencia extrema, como la competencia de la vida. Pero quería hacerlo a través de personajes reconocibles para todos”, explicó el director a Variety.