El ministro de Justicia, Martín Soria, confirmó la aparición de un testigo que corrobora la llegada de armamento enviado por del gobierno de Cambiemos en apoyo al golpe de Estado contra Evo Morales en 2019.

Se trata de un empleado de la embajada argentina en Bolivia que presenció el instante en que la Fuerza Aérea Boliviana (FAB) y la policía local se repartían las municiones que acababan de llegar desde Argentina el el 13 de noviembre de 2019, tres días después del pronunciamiento de las Fuerzas Armadas. A partir de esta declaración, el gobierno trabaja en una ampliación de la denuncia que tramita en el fuero penal económico.

El empleado, de quien no se conoce el nombre por motivos de seguridad, fue parte de la comitiva de la embajada argentina que se acercó hasta el aeropuerto de El Alto a recibir el Hércules C-130 del que se bajaron los armamentos que habían acompañado a los efectivos de seguridad que tenían ordenes de proteger la embajada y la residencia argentina en La Paz.

Lo que yo vi claramente es que estaban bajando unas cajas grandes y las separaron. Una parte se metió al hangar de la Fuerza Aérea, y la otra se cargó en la camioneta de la Policía Boliviana”, afirmó el testigo.

En una entrevista, el testigo declaró que "vio que estaban bajando unas cajas muy grandes”. “Lo que yo vi claramente es que habían separado estas cajas. Uno tomó una parte del montacargas y lo metió al hangar de la Fuerza Aérea, y la otra parte se cargó en la camioneta de la Policía Boliviana”, agregó.

El hombre afirmó también que fue él quien recibió, en un sobre cerrado, la carta de agradecimiento de la FAB al gobierno de Mauricio Macri. Más adelante se enteró que ese sobre que había tenido en sus manos era el motivo por el cual comenzó el proceso de investigación por el cual se imputó al ex presidente.

Además de Macri, están imputados en la causa el ex jefe de Gabinete, Marcos Peña; la ex ministra de Seguridad, Patricia Bullrich; el exministro de Defensa, Oscar Aguad; el ex canciller Jorge Faurie; el ex jefe de la Gendarmería, Gerardo Otero; y el exembajador argentino en Bolivia, Normando Álvarez García.