Alejandro Bercovich se refirió a los dichos del presidente de la Unión Industrial Argentina, Daniel Funes de Rioja, que consideró que las empresas deberían “cesar la remuneración” de aquellos empleados que decidan no vacunarse.

“Aquel que está con primera dosis ya puede ser convocado, pero se genera el problema con los que no quieren vacunarse. En ese caso nadie puede obligarlos, pero nadie puede obligar a insertarlos en un medio laboral con riesgo para otros trabajadores y sus familias. Por lo tanto, entendemos que en esos casos cesa la dispensa y cesa la remuneración”, expresó Funes de Rioja.

Su predecesor, Juan Ignacio De Mendiguren, respaldó su propuesta y señaló que "se está proponiendo buscar un mecanismo que tiene que ver más con incentivar a la vacunación". "No hay posibilidad de que hoy una empresa lo haga motus proprio, o decida no remunerar a un trabajador, lo que se intenta es hacer algo en conjunto con el sindicato", completó.

El periodista, antes de explicar sus conclusiones sobre el caso, remarcó fervientemente que está en contra de aquellos que deciden no vacunarse y de aquellos que siembran dudas sobre su efectividad. Bajo la misma línea, agregó que primero "la vacuna tiene que ser declarada obligatoria para que sea exigible en los términos en los que propone de la UIA".

"¿Quién puede decir si es obligatorio o no? El Estado", remarcó al aire en Radio Con Vos. También lo comparó con aquellos lugares, como bares o restoranes, que deciden reservarse los derechos de admisión y prefieren prohibir el ingreso de aquellos que no tengan las dosis aplicadas.

"Es muy distinto decir 'no voy a permitir el ingreso tuyo porque ponés en riesgo la vida de los demás' que decir 'no te dejo entrar y además no te pago el sueldo'", subrayó. "Lo que hace Funes de Rioja es algo ilegal".

"Son diferencias que parecen menores pero que no lo son. Acá hay una avivada", continuó.

"Hay una intención de arrogarse un poder de policía que no tiene. Si quiere proteger a sus empleados bien hace en pagar el remis u organizar micros con distancia social para que no usen el transporte público, bien hace en readecuar los espacios de la fábrica para trabajar".

"El empleado se tiene que vacunar para protegerse a si mismo, a su familia y a sus amigos, no porque un empresario por tener el capital y ser le dueño se crea que también tiene el poder de policía", finalizó.