Sebastián Romero, el dirigente del Partido Socialista de los Trabajadores Unificado (PSTU) que fue fotografiado tirándole con un mortero a la policía en la movilización del 18 de diciembre del 2017, se presentó como precandidato a senador por Santa Fe. Hoy, Romero se encuentra imputado por el hecho.
El precandidato está detenido con prisión domiciliaria hace más de un año. Fue extraditado por Uruguay para enfrentar el juicio en la Argentina. Ahora, busca ser senador en lista del Frente de Izquierda y de los Trabajadores- Unidad (FIT-U) de Santa Fe.
En la presentación virtual de candidatos del PSTU, Romero declaró: "Hoy soy el único candidato preso político que hay en Argentina. Pero no soy el único preso político, teniendo en cuenta que tenemos a Milagro Sala y Luis D'Elia".
Agregó: "Todos fuimos perseguidos por el gobierno anterior. Nos persiguió, nos empobreció y nos dejó sin trabajo. Pero este gobierno no está siendo distinto. En cierta medida, hasta sigue teniendo presos a compañeros de sus organizaciones".
Romero, Daniel Ruiz y César Arakaki son los tres referentes de izquierda imputados por los hechos de violencia en la movilización contra la reforma del sistema previsional de Mauricio Macri. Están acusados de "intimidación pública y atentado contra la autoridad agravado por haber sido cometido a mano armada y por la reunión de más de tres personas, en concurso ideal entre sí".
El precandidato a senador Romero estuvo prófugo más de dos años. El 25 de junio del año pasado fue detenido en Uruguay. Lo encontraron en Chuy, una localidad cerca de la frontera con Brasil, y se dictó su extradición.