El nuevo presidente del Perú es un izquierdista raro. O, al menos, raro para la izquierda y el progresismo argentinos. Pedro Castillo está, y lo dijo durante la campaña, en contra del aborto, el matrimonio igualitario y la legalización de la marihuana. Ahora que es presidente, planteó una medida aún más polémica: quiere implantar el servicio militar obligatorio para todos aquellos jóvenes que ni estudien ni trabajen.
Ante la presencia de Alberto Fernández en el acto de asunción de Pedro Castillo, Patricia Bullrich se refirió a este llamativo desacuerdo entre el presidente argentino y el peruano. "Decile a Castillo las mismas cosas que a mí me dijeron sobre el servicio cívico" expresó la exministra de Seguridad. Ese "Servicio Cívico" al que la ministra se refiere fue una medida de su gobierno en el 2019. La idea era ofrecerle una suerte de "Servicio Militar Voluntario en Valores" a los jóvenes que optaran por ello. Los cursos los iban a dar oficiales de gendarmería, y apuntaba a llegar a los 800.000 jóvenes "Nini" del país.
Ahora quiero escuchar a los que tanto han defendido al presidente de Perú, a ver si defienden también sus políticas".
Según explicó la exministra en Radio La Red, ese tipo de institución "es la manera de darle a los jóvenes una posibilidad de tener los elementos básicos para volver al trabajo, levantarse a horario, aprender un oficio y tener una disciplina”. Además, disparó: "Ahora quiero escuchar a los que tanto han defendido al presidente de Perú, a ver si defienden también sus políticas. No solamente lo defiendan porque dice estar de un lado del hemisferio político".
La presidencia de Castillo, como el asilo político a Evo Morales y Álvaro García Linera, fue una de las apuestas continentales del presidente Fernández. El gobierno argentino reconoció su victoria un mes antes que el estado peruano. En aquel momento la candidata derrotada, Keiko Fujimori, clamaba fraude. El organismo electoral de Perú no reconoció la victoria de Castillo hasta resolver los planteos de su equipo legal.