Luego de que el canal CNN hiciera un informe el lunes reportando una posible fuga en la planta de energía nuclear de Taishan, China, las autoridades de ese país salieron a aclarar las versiones y dijeron que “los niveles de radiación son normales alrededor de la planta”.
Según la investigación, el gobierno de Estados Unidos estaba evaluando la fuga y había advertencias sobre una “amenaza radiológica inminente”.
“No hay anomalías en el entorno de radiación alrededor de la planta de energía nuclear"
Primero las autoridades de China dijeron que los niveles de radiación eran normales y no había peligro. El vocero del Ministerio de Relaciones Exteriores, Zhao Lijian, señaló en una conferencia de prensa en Beijing: “No hay anomalías en el entorno de radiación alrededor de la planta de energía nuclear. Su seguridad está garantizada”
Sin embargo, reconocieron que hubo un alza en la radiactividad en el interior de uno de los reactores, que fue provocada por cinco barras de combustibles dañadas que causaron una acumulación de gases radiactivos.