La reducción de la mortalidad materna y el aumento del acceso a la planificación familiar podrían sufrir retrocesos por culpa de la pandemia.

Un informe de la Organización Panamericana de la Salud (OPS) reveló que esto podría suceder por primera vez en más de 20 años si continúa la interrupción de los servicios de salud para las mujeres.

"Quiero destacar las devastadoras repercusiones sanitarias, sociales y económicas que este virus ha tenido en las mujeres", remarcó la directora de la OPS, Carissa Etienne, en una conferencia de prensa desde la sede del organismo, en Washington.

La importancia de los controles en el embarazo

“Los controles evitan las complicaciones y las enfermedades que puede tener la mujer embarazada”, precisó Armando Pérez (M.N. 107.628), médico ginecólogo y obstetra, a Diario Con Vos. "Los controles tienen que ser precoces –es decir, consultar lo más rápido posible al médico para comenzar con los estudios y con las pautas de alarma–, periódicos –por lo menos 5 para tener un adecuado control del embarazo; habitualmente se realizan entre 8 y 9 controles de cada embarazada, casi uno por mes– y completos –de laboratorio, ecográficos y controles que requiere el feto–", enumeró Pérez.

Los controles durante el embarazo deben ser precoces, periódicos y completos", destacó el doctor Armando Pérez.

Entre las consecuencias de no realizarse los controles, el doctor Pérez señaló: "que no se puedan detectar precozmente las enfermedades y las alteraciones en el crecimiento fetal".

"Particularmente el año pasado la embarazada casi ni consultaba. Después entendieron que se tenían que controlar. Nosotros a veces llamábamos a las embarazadas para que sigan teniendo sus controles", subrayó Pérez. "Hoy siguen estando preocupadas y asustadas con el aumento de casos en todo el país y sobre todo con las consecuencias que puede tener, porque son pocos los estudios que ha habido a las embarazadas".

Un gran retroceso para Latinoamérica

"Según estimaciones de la ONU, hasta 20 millones de mujeres en las Américas verán interrumpido su control de la natalidad durante la pandemia, ya sea porque los servicios no están disponibles o porque las mujeres ya no tendrán los medios para pagar la anticoncepción", subrayó Etienne, en un comunicado publicado en la web de la OPS.

"Si esto continúa, se espera que la pandemia haga desaparecer más de 20 años de avances en la ampliación del acceso de las mujeres a la planificación familiar y en la lucha contra la mortalidad materna en la región. Casi todas las muertes maternas son evitables e incluso volver a los niveles de mortalidad materna anteriores a la pandemia, que ya eran altos, podría llevar más de una década", alertó.

La tasa de mortalidad materna en América Latina y el Caribe se redujo de 96 a 74 muertes por cada 100.000 nacidos vivos entre 2000 y 2017, una reducción global del 23,1%, de acuerdo a la OPS.

Etienne instó a los países a garantizar los servicios de salud a mujeres y niñas, y remarcó que la desigualdad en términos económicos se acrecentó en estos últimos 15 meses.

El estudio de Oxford

Un estudio de la Universidad de Oxford develó que las embarazadas están sufriendo complicaciones de salud como consecuencia del Covid. Se registró un incremento de muertes de mujeres embarazadas con Covid en comparación con el inicio de la pandemia.

El motivo, de acuerdo a los expertos, es que “la modulación del sistema inmunitario (normal en toda gestante) y los cambios en la coagulación materna determinarían la mayor afectación de las mujeres en ese estado frente al virus”.

Al menos 1.000 mujeres embarazadas fallecieron por complicaciones del virus y la atención al embarazo y al recién nacido se suspendió en casi la mitad de los países en el continente americano.

“Las mujeres embarazadas con COVID-19 tienen más de un 50% de probabilidades de sufrir complicaciones en el embarazo (parto prematuro, preeclampsia, eclampsia e ingreso a la UTI) en comparación con las mujeres embarazadas sin COVID-19”, señalaron desde la Universidad de Oxford.

Un estudio en 18 países con más de 2.130 embarazadas con COVID-19 demostró que las gestantes mostraron más complicaciones, así como también los bebés. Se comprobó que aquellas con diagnóstico positivo tenían un mayor riesgo de un índice compuesto de morbilidad y mortalidad materna, mientras que los bebés poseían un índice de morbilidad neonatal y mortalidad perinatal grave, mucho más alto que los recién nacidos de mujeres sin Covid.

La incidencia de las comorbilidades

La investigación advirtió además que las embarazadas con comorbilidades (obesidad, hipertensión inducida por embarazo y enfermedades metabólicas) sufren mayores problemas al contraer Covid y requieren un 10% más de asistencia respiratoria frente al 1% sin el virus. Las mujeres en el puerperio inmediato también presentaron más síntomas y muertes respecto a las no infectadas. Frente a estos datos, desde el American College of Obstetricians and Gynecologists y el Royal College of Obstetricians and Gynecologists recomiendan vacunar a todas las embarazadas, con o sin comorbilidades.

“Podemos inferir que el embarazo, con sus cambios concomitantes, transforma la gestación en un embarazo de alto riesgo y mayor aún con las comorbilidades, incrementando a más del 22,3% el riesgo de muerte frente a las no embarazadas”, alertaron los investigadores.