Las autoridades de la Ciudad de Buenos Aires clausuraron ayer el mítico bar Carnal, ubicado en el barrio porteño de Palermo, luego de que la policía recibiera numerosas denuncias de que allí se realizaba una fiesta clandestina.
Las autoridades de la Policía de la Ciudad observaron a través de las redes sociales que en el establecimiento se estaba desarrollando una fiesta clandestina para unas 70 personas con una banda tocando en vivo.
El Ministerio Público Fiscal porteño actuó de oficio y envió un operativo en donde se detuvo a los dos dueños del bar: Hernán y Facundo Del Campo.
Carnal está en Niceto Vega al 5500 y se encontró con un evento con demasiada gente en un mismo lugar, sin barbijos, en un lugar cerrado, con poca ventilación y sin medidas sanitarias ni de distanciamiento social.
El fiscal Miguel Kessler quedó a cargo y se secuestraron equipos de música y audio y las luces de la fiesta. Los detenidos están señalados por el Artículo 205 del Código Penal, para el que violare las medidas para impedir la introducción o propagación de una epidemia, con una prisión de entre seis meses y dos años.
Además, les corresponde el Artículo 239, con una pena que va de 15 días a un año de cárcel y el Artículo 129 del Código Contravencional, por encubrimiento de actividad de baile.