En Pasaron Cosas, Alejandro Bercovich reflexionó sobre la desigual distribución de las vacunas contra el Covid-19 a nivel mundial. De hecho, "el 56% de las dosis se inocularon en países que tienen el 16% de la población mundial", indicó.
Este fin de semana trascendieron 3 noticias relacionadas con este problema. Por un lado, la Casa Blanca evalúa levantar las patentes de las vacunas para permitir que se produzcan en laboratorios de países con la tecnología suficiente y avanzar con la inmunización global. Esto generó un gran rechazo por parte de los fabricantes.
"10 países concentraron 3 de cada 4 dosis colocadas", subrayó.
A su vez, el New York Times difundió que EE.UU. tiene decenas de dosis de Astrazeneca almacenadas, sin distribuir, porque aún no está aprobada. Bercovich resaltó lo dicho por Tedros Adhanom, director general de la OMS, quien considera estos actos como un "ultraje moral" y "económica y epidemiológicamente contraproducentes".
Por último, se supo que el primer ministro de Reino Unido, Boris Johnson, le atribuyó el éxito de las vacunas "al capitalismo y la codicia" ya que, según él, los laboratorios desarrollaron las dosis y sus variantes para hacer dinero. "Esas vacunas en realidad fueron subvencionadas por miles de millones de dólares de los gobiernos, entre otros, el suyo", aclaró.
"Es obvio que el desarrollo de la vacuna es producto del sorprendente avance científico pero que fue costeado por los Estados, no los privados", explicó. "En realidad, el lucro es lo que está haciendo que se estire la pandemia. Si se perdiera de vista el lucro podríamos este año ponerle fin a esta pesadilla".
"En la cabeza de los países más desarrollados hay tipos que creen que primero se tienen que servir ellos y después vemos", finalizó Bercovich.
