Beatriz Sarlo precisó más detalles sobre su declaración por la vacunación vip en Radio Con Vos. Según afirmó ante la jueza María Eugenia Capuchetti, el ofrecimiento para que se aplicara la Sputnik V fue realizada por Soledad Quereilhac, la esposa del gobernador de la provincia de Buenos Aires Axel Kicillof.

A fines de febrero Sarlo recibió esta propuesta por parte de su editor de Siglo XXI, Carlos Díaz. Para acreditar sus dichos, presentó mails en donde surge la convocatoria a formar parte de una campaña para generar confianza en la dosis rusa.

“No acepté vacunarme porque tengo ética. A la jueza le voy a dar la información”, dijo previamente ante la prensa. Aseguró que no tenía medios para comprobar que se trataba de una campaña pública, por lo que consideró que se trató de algo "por debajo de la mesa".

En medio de un tenso dialogo con Diego Iglesias y Alejandro Bercovich, ratificó que "la frase 'por debajo de la mesa' fue muy poco apropiada". "Si está mal la expresión que me procese la provincia. Tendría que haber dicho que me llegó un mail sin ninguna explicación de quién se iba a vacunar ni cómo ni cuando", agregó.

En el programa le preguntaron si era consciente del uso político de la oposición sobre esta frase para desprestigiar la campaña de vacunación, a lo que respondió: "usted sabe lo mucho que se me sobre utiliza para putearme por redes sociales? Yo tendría que estar suicidada".

"No quiero contarle lo que Página 12 distorsiona las noticias aparecidas en los diarios", agregó al hablar específicamente de los medios. "De lo único que me hago responsable es de las cosas que yo dije, no de lo que otros hagan con lo que yo dije. Si alguien quiere iniciarme una causa que vaya a Comodoro Py y lo haga", agregó.

"En ese momento me pareció arriesgado citar a las personas en esos mails. La verdad que ni siquiera son funcionarios estas personas. Que yo sepa la esposa del gobernador no es funcionaria", explicó al hablar de los motivos de su nota.

En cuanto a su relación con Soledad Quereilhac, mencionó que era excelente, no muy estrecha por sus roles en la universidad pero que siempre fue muy buena alumna. En cuanto a su editor Carlos Díaz indicó que es una persona que habla pésimo "pero que todo el mundo le va a dar la razón".

Finalizó la entrevista mencionando que cada uno es responsable de sus propias palabras y que cualquier otra cosa que pueda agregar podría jugar en su contra.